Naturaleza
Parque Natural de la Sierra de Cardeña y Montoro.
Entorno del Lince Ibérico.
El Parque Natural de La Sierra de Cardeña y Montoro se encuentra muy marcado por el Valle de los Pedroches. La serenidad del entorno se refleja incluso en el paisaje, de formas redondeadas y suaves lomas, resultantes de la lenta erosión del granito, predominante en la zona tanto de manera natural como en las construcciones que nos podemos encontrar por cualquiera de los caminos que escojamos. Sólo se exceptúan los cursos de los ríos Yeguas y Arenoso, en los que reina la nutria de igual manera podemos encontrar jabalíes, ciervos, cabras montesas, águilas, buitres leonados, perdices, y fauna de monte bajo.
La vegetación que lo cubre está compuesta, por dehesas, pinar y monte mediterráneo, constituyendo un lugar ideal para la caza, mayor y menor. Por su parte, en los pinares de piñonero y resinero, se aprovechan piñones y madera. En las dehesas, el hombre ha conseguido armonizar los escasos aprovechamientos agrícolas con los pastos y la ganadería, además de la miel y otras actividades tradicionales extractivas. Por tanto, es obligado deleitar el paladar con los productos del cerdo ibérico, alimentado de bellota en la dehesa, y con los guisos de la caza. También es famosa la leche de las vacas alimentadas en este Valle de los Pedroches. El Parque Natural ofrece una completa red de senderos que el caminante puede recorrer a pie, a caballo o en bici. A través de ellos observará desde las piaras de cerdos en las dehesas hasta vacas pastando o, en función de la estación y la hora, numerosos ciervos y jabalíes. También es frecuente divisar numerosas rapaces, ya que aquí conviven numerosas especies de águilas (imperial, real, calzada y culebrera), buitres (negro y leonado) y la cigüeña negra junto con la blanca. El sendero señalizado Aldea del Cerezo-Venta del Charco recorre la única dehesa de roble melojo existente en la provincia. Igualmente, muestra los típicos bloques redondeados de granito, llamados «bolos» por los habitantes de la zona. Al caer la noche le invitamos a que disfrute de las actividades que les ofrecemos o simplemente a disfrutar de la paz y el silencio de la noche.
La visita al Parque Natural puede completarse con una visita al centro de visitantes Venta Nueva, que cuenta con un completo conjunto interpretativo de este espacio y donde el visitante encontrará información de las distintas rutas de senderismo que se pueden realizar; un paseo por el puente gótico-renacentista de la señorial Montoro y por su conjunto histórico artístico, tras el cual, lo mejor es hacer una parada para degustar las típicas logroñesas. Otra opción, esta vez en Cardeña, es saborear los derivados del cerdo ibérico y la carne de caza.
Este Parque es, por tanto, un espacio en el que sus habitantes han sabido vivir en armonía con el medio natural, donde contrasta el paisaje rural de las aldeas con la aristocracia de Montoro y donde los usos tradicionales, la artesanía y, en los últimos años, el creciente turismo rural sustentan la economía de la zona.